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11 de mayo del 2000 -LA CAPITAL-
" El fiscal maneja una hipótesis y trata de encajarla en algún lado"
La asociación de Norma Godoy con el Caso Cigarreta "responde a que el fiscal Norberto Quantín maneja una hipótesis y trata que encaje en algún lado", aseguró ayer uno de los abogados de la legisladora.
El abogado César Sivo -uno de los letrados que representa a la diputada nacional justicialista Norma Godoy ratificó ayer que su cliente no "está imputada en ninguna causa por tráfico de bebés ni en ninguna otra". Asimismo, se explayó en forma puntual sobre los elementos de la hipótesis investigativa que maneja el fiscal porteño Norberto Quantín asociando el nombre de la legisladora con el "Caso Cigarreta".
Sivo
aclaró que no es el defensor de Godoy explicando que “en principio no hay una
necesidad de una defensa en la justicia,
ya que efectivamente ella no tiene ninguna imputación en ninguna parte”.
En
declaraciones formuladas a LU9, Radio Mar del Plata, el letrado criticó el enfoque
mediático del caso, y advirtió que "en los expedientes judiciales pasa
exactamente lo contrario de lo que ha aparecido en los medios" de prensa.
Consultado
sobre cómo se vincula el nombre de Godoy a la causa por supuesto tráfico de
bebés, Sivo comentó que "todo
comienza con una denuncia anónima, que motiva una investigación en Buenos Aires,
iniciada por el fiscal Norberto Quantín".
"En
esta investigación surge que en la provincia de Misiones se habría hecho una
inscripción ilegal de un bebé de una señora que era funcionaria de
gobierno", acotó el abogado.
Sivo agregó que "inicialmente, se investigan las características de esa inscripción y eso tiene una causa en Buenos Aires, que quedó desestimada, porque no hay nada, y se remite una parte del expediente a Misiones, para certificar cómo había sido esa inscripción".
Causa cerrada
"Se
hizo todo un estudio, se revisa todo lo del Registro de las personas, cuáles
fueron los certificados de nacimiento, y hay un informe del fiscal interviniente
en la causa, Lucía Herrera (h), que dijo que la clínica existe, como también
el doctor Barreiro".
Por
otra parte, indicó que sí bien actualmente en ese lugar funciona una centro
oftalmológico, en la época en que nació la criatura había una clínica de
obstetricia.
Asimismo,
puntualizó que en ese entonces la madre de la niña -ex funcionaria de María
Julia Alzogaray -se hallaba cumpliendo tareas oficiales.
“Ni
en la causa de Buenos Aires, ni en la de Misiones, la diputada aparece en algún
momento como imputada" por la supuesta venta de una nena en la provincia de
Misiones, aseguró el abogado.
Preguntado
sobre cómo, entonces, surge el nombre de Norma Godoy en la causa de Mar del
Plata, en la que se investiga la supuesta desaparición de la hija del
matrimonio Ortizá-Cígarreta, Sivo manifestó que "posiblemente, de
acuerdo al criterio de fiscal Quantín, las investigaciones anteriores pueden
tener algo que ver” con la de la ciudad atlántica.
"A
título personal, pienso que Quantín, en una cuestión de buena fe, sostiene
una hipótesis y trata que la misma encaje en algún lado",evaluó.
Acerca
del fax que estaría agregado a la causa, indicó que "sí, hay un fax que
se refiere a un chico de 2 kilos 700 gramos, pero no se sabe de dónde salió.
Es un elemento que apareció en forma anónima con la denuncia. Y es importante
aclarar que habla de un niño y no de una niña".
Sivo
consideró finalmente que en estos momentos su "más seria preocupación
pasa por el manejo de la información" y aclaró que si bien no le
interesa" enfrentarse con los medios porque "lograron esclarecer un
montón de cosas, al menos en este caso se apresuraron".
"De,
ninguna manera estoy diciendo que los medios no traten temas como éstos, pero
es importante que a la sociedad le quede claro cómo son las cosas: en el
expediente no pasó nada”, concluyó el letrado.
Godoy
se reunió el martes con el bloque de diputados justicialistas, en el Congreso
de la Nación, ocasión en la cual ofreció explicaciones acerca del caso.
En 1998, el fiscal norberto Quantín recibió una denuncia anónima especificando que una exfuncionaria de María Julia Alsogaray habría simulado un embarazo para registrar el nacimiento de una menor como hijo propio.
Siempre de acuerdo a esa denuncia anónima, la diputada norma Ancarani de Godoy y Lucrecia Ancarani habrían participado, llevando clandestinamente un menor desde Misiones a Buenos Aires.
En una resolución emitida el 24 de marzo de 1999, el magistrado misionero que estuvo a su cargo la investigación -doctor Enrique Gallardo, juez penal de instrucción- señaló que las sospechas del fiscal Quantín responden a "una interpretación del mensaje supuestamente interceptado por los anónimos denunciantes y que habría sido transmitido vía fax desde el teléfono de Lucrecia Ancarani a la oficina de su hermana Norma Ancarani de Godoy".
El juez consideró que el fax en cuestión tiene nulo valor como elemento de prueba, "debido a la circunstancia de no haber cumplimentado de las debidas formalidades para su obtención".
No obstante , también cuestiona su contenido, debido a que contienen palabras extrañas al idioma castellano que fueron sometidas por los denunciantes a una traducción que , por lo subjetiva "resulta inaceptable".
Se suma a ello un informe producido por telecom y por la observaciones judiciales de la secretaría de inteligencia del Estado. La citada empresa y dicho organismo efectuaron intervenciones telefónicas y una investigación especial sobre el mencionado fax. Según la resolución del juez "no se encuentra acreditado que el referido mensaje haya sido trasmitido entre las mismas. Tampoco fue interceptada conversación alguna relacionada con el tema".
El juez misionero también solicitó informes a todas las comisarías dependientes de la policía provincial, requiriendo antecedentes sobre casos denunciados de sustracción de bebés entre setiembre y noviembre de 1997. La respuesta fue la inexistencia de esa naturaleza.
También requirió a la Dirección del Registro Provincial de las personas las circunstancias en las que fue inscripta la hija de la exfuncionaria de María julia Alsogaray. El magistrado dejó constancia en su resolución que recibió "copia adjunta certificada del acta, idéntica a otras anteriores colectadas por la instrucción, e informando que las mismas se habrían labrado bajo las formalidades y previo cumplimiento de los requisitos de práctica".
El juez llegó a las siguientes conclusiones:
En consecuencia el juez sobreseyó a la ex-funcionaria de María Julia Alsogaray y desestimó la denuncia contra Norma Ancarani de Godoy y su hermana Lucrecia Ancarani.
También vale reseñar la manera en que la denuncia del fiscal Quantín llegó a la justicia misionera. El funcionario había denunciado tales hechos ante la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional con sede en Capital Federal.
El caso, previo sorteo, fue derivado al juzgado nacional de instrucción 34, a cargo de Federico Salvá.
Este magistrado derivó parte de las actuaciones a la justicia misionera para que investigada la supuesta sustracción de una menor que estaría a cargo de una exfuncionaria de María Julia Alsogaray. Los resultados de esa investigación corresponden a la resolución judicial ya reseñada.
Asimismo, el juez Salvá resolvió otra parte de la denuncia de Quantín, referida a la presunta "sustracción y comercialización de otros menores de edad por parte de Lucrecia Ancarani y de Hilda Ancarani de Godoy, teniendo como base para ello una triangulación de las triangulaciones entre Buenos Aires-mar del Plata-Provincia de Misiones".
El 2 de noviembre de 1998, el juez Salvá decidió "reservar las actuaciones por no cumplir la denuncia con los requisitos" necesarios. Tal resolución quedó firme porque, en segunda instancia, el fiscal de cámara "desistió fundadamente del recurso interpuesto por su inferior jerárquico".
A fines de 1999, los elementos del fiscal Quantín fueron remitidos a la justicia de Mar del Plata que, para agotar toda instancia, decidió que la hija de la ex-funcionaria de María Julia Alsogaray sea sometida a una examen de ADN.